Reseña de Uglies #3: Especiales, de Scott Westerfeld

Especiales - Scott Westerfeld

Título original: Specials
Autor: Scott Westerfeld
Saga: Uglies
Editorial en inglés: Simon Pulse (Simon & Schuster)

Editorial en español: Montena
Fecha de publicación original: 2005
Fecha de publicación en español: 2009
Traducción: Ángeles Leivas Morales
Número de páginas en inglés: 384
Número de páginas en español: 380
Encuadernación en inglés: tapa dura; tapa blanda
Encuadernación en español: tapa blanda con solapas

Sinopsis de la contratapa:

Tally creía que eran sólo un rumor, pero ahora es una de ellos...
Ya hace mucho tiempo que Tally dejó de ser una imperfecta rebelde e indisciplinada. Por aquel entonces, ella aún creía que los especiales no eran más que un rumor siniestro y aterrador: de ellos se decía que eran veloces, atractivos y crueles como nadie. Irónicamente, el destino la ha llevado a convertirse en especial, y, tras someterse a la más sofisticada de las operaciones quirúrgicas, ha recibido una misión: acabar con la resistencia...

Book trailer:

Mi opinión:

Lo terminé recién, y me alteré ¡TANTO!
Les advierto que acá hay spoilers inevitables de los libros anteriores. Están advertidos.

Después de haber luchado con tanto ahínco contra el sistema de la ciudad, Tally ahora es especial. Pero no sólo eso: forma parte del grupo más selecto de especiales, los cortadores, liderado por Shay y compuesto por un puñado de nuevos perfectos ingeniosos re-operados. Ahora sus huesos son de cerámica, sus dientes y sus uñas son afilados y mortíferos, sus facciones crueles, dispone de visión de infrarrojos, chips de comunicación integrados, más terminaciones nerviosas de la cuenta, tatuajes flash que se mueven por su piel formando una red de encaje, fuerza y velocidad sobrehumana... Para nuestros parámetros, es una monstruosidad. Pero para los de la Doctora Cable, es uno de sus consentidos y su orgullo: la rebelde Tally Youngblood reducida a su ejército (no exactamente, pero casi).
Ahora, las cosas dejaron de ser chispeantes para ser glaciales, un nueva visión del mundo, mucho más nítida y bella, casi dolorosa. Y lo que sí es doloroso son las heridas que se realizan los cortadores, un sufrimiento peor que el de una persona normal, ya que hay más terminaciones nerviosas... pero los dotan de una visión mucho más glacial si cabe.
Sin embargo, lo más doloroso de todo no son las autoflagelaciones, sino el hecho de que Zane no esté con ella. Por algún motivo, a él no lo hicieron especial sino un simple y mediocre perfecto otra vez, y Tally se debate entre el amor que le tiene y la repulsión que le causa su debilidad. Por eso lleva a cabo, con Shay, un plan: van a colarse en el arsenal, el edificio donde se guarda todo el material de guerra, tanto pasadas como futuras. La idea es robar algo con lo que liberar a Zane de su collar de comunicación para que pueda escapar al Nuevo Humo, pero que todo parezca obra suya, para que cuando los especiales lo vuelvan a encontrar, haya demostrado ser lo suficientemente especial por sí mismo como para recibir la más delicada de las cirugías. Y pasa asegurarse de su bienestar, Tally y Shay lo siguen de cerca, valiéndose de sus sentidos especiales para sobrevivir en plena naturaleza... Pero la vida a la intemperie siempre cambia a Tally. Lo suficiente para que Shay le declare su odio, pero ¿cambiará también lo suficiente para salvar no sólo a Zane, sino a sí misma?
Tengo un estado general de aturdimiento con el final. Hubo algo que de verdad no me esperaba. Lloré. No demasiado, porque el ritmo no me lo permitió: Tally tuvo que volver a ponerse en movimiento, y por ende yo también. Chicos, sufrimos una baja. Lo siento tanto... todavía duele. Fue un héroe. Un héroe, dije. SPOILER mi Zane. Murió mi Zane, no aguantó la cirugía que le repararía la lesión cerebral. Murió el único personaje que no me cayó mal en toda la trilogía. Va a estar siempre conmigo <3 FIN DEL SPOILER.
Lo leí sin tomar notas, como suelo hacer. La verdad es que no me daban ganas de tomar notas, nada más quería saber qué pasaba con Zane.
Tally ahora es... es un ser odioso. Es una máquina mortífera que desprecia a todos los que no son como ella. No puedo creer que no era capaz de mirar a Zane a los ojos, sólo porque tiene temblores. Es inconcebible que le cause tal repulsión. La detesto, de verdad.
Shay es más de lo mismo, pero además tiene esa actitud tan horrible de líder todopoderosa. Y manipuladora. No me gusta.

Este es el Zane imperfecto de la novela gráfica :)

David casi ni aparece (otra vez), porque todo el libro se basa en Tally persiguiendo a Zane y su grupo de rebeldes por la naturaleza, peleada con Shay e incomunicada con todo el resto; y cuando el viaje termina, sigue sin haber comunicación con David.
Y Zane está débil. Muy, muy débil. No puedo decir más, porque no se sabe más. Gran parte son sólo los pensamientos de Tally.
A ver, no puedo pensar en nada más que en el final, que me pareció más que... feo. Esa muerte fue innecesaria. Totalmente innecesaria. A ver: cuando murió SPOILER de Sinsajo Prim FIN DEL SPOILER, si bien dolió, se entendió el motivo: era lo justo. Se detuvo la guerra, pero murió la persona por quien había empezado. Pero en este caso, la muerte fue porque sí. Soy capaz de aguantar una baja con sentido, pero las que están puestas porque sí, no me gustan (mentira, en realidad también tiene sentido, nada más estoy enojada).
Um... ¿de qué más tenía que hablar? Ah, sí. Bueno, me pasó un poco lo mismo que con Perfección: si bien al principio toda esa cosa futurista se antojaba tan natural, ahora de TAN natural que es se me pierden los detalles, y más de una vez me noté leyendo párrafos por encima para no enroscarme. Es decir, el concepto se entiende, pero todas las maquinarias y sistemas nuevos, a veces son algo confusos.
El principio, igual que en los dos tomos anteriores, me aburrió y se me hizo lento, pero fue peor porque los personajes no me gustaban. Además el asunto de los cortadores y sus autoflagelaciones fue muy emo para mi gusto, y no creo que sea un tema para bromear al respecto, o cuando menos no para tomarlo tan a la ligera.
Bien, creo que no hay mucho más que decir al respecto. En general, creo que fue el que menos me gustó. No por la trama, ni por nada parecido. Es que esa muerte me lo empañó todo. Sí, por eso no me gustan las distopías. Creo que en el mundo hay ya suficiente odio, maldad y caos como para también leer sobre eso.
La portada es la que menos me gusta de las cuatro. Si bien estéticamente me resulta agradable, ni siquiera sé quién es el chico. ¿Es Zane? No son sus características físicas. ¿Es David? No aparece suficiente. ¿Es algún otro? ¡Pero si no hay más protagonistas masculinos! Está Fausto, claro, pero no creo que sea suficientemente importante (perdón, Fausto, sos simpático, pero es verdad).
En fin.
¿Lo mejor del libro? Sigue siendo la ambientación, que me tiene encandilada. Esta vez, destaco los trajes de infiltración: una especie de monos (vestimenta, no animales) de un material que se camufla como los camaleones o se transforma en una coraza, y además oculta su calor corporal de la visión de infrarrojos. Increíble.
¿Lo peor del libro? ¿Qué, no quedó claro? La muerte, claro.
¿Lo recomiendo? Ok, acá estamos en una disyuntiva. Si fuese un tomo único, probablemente no lo recomendaría, por el simple hecho de que yo no recomiendo distopías. Pero como es el último, el concluyente (?) de la trilogía, la verdad es que si leíste los anteriores (que sí recomiendo) no hay manera de que te quedes en paz con vos misma/o. ¿Conclusión? Ni idea, hacé lo que tengas ganas.
Calificaciones:

Redacción: 4/5

Ritmo de lectura: 4/5

Originalidad: 5/5

Desarrollo: 4/5

Ambientación: 5/5

Personajes: 3.5/5

Desenlace: 3/5

Portada: 3.5/5

Calificación general: 4/5

Sobre el autor:

Scott Westerfeld nació el 5 de mayo de 1963 en Texas, Estados Unidos, aunque su vida adulta transcurrió a caballo entre Nueva York y Sydney. En 2001 contrajo matrimonio con la escritora Justine Larbalestier. Si bien es conocido por sus tres series de novelas de corte juvenil, Westerfeld es también un reconocido compositor de música de danza moderna. Se licenció en filosofía en Vassar y se dedicó profesionalmente a la música y a actuar de negro literario para diversos autores y editoriales, además de crear software educativo para niños. Ha publicado asimismo un puñado de novelas de ciencia ficción para adultos.

Tiene varios premios en su haber (entre ellos una mención honorífica al Philip K. Dick de 2000 y un Victoria´s Premier). Dos de sus libros fueron incluidos en la lista de Best Books for Young Adults de 2006.

En la web:

• Blog del autor: Westerblog

Otros títulos en la colección:

Uglies #1- Traición: Como todos los chicos y las chicas de su edad, Tally espera con impaciencia cumplir los 16 años, porque entonces las autoridades la someterán a una operación estética para convertirla en perfecta. Pero justo antes de su cumpleaños, su mejor amiga, Shay, huye para unirse a la resistencia, un grupo de imperfectos que viven en una ciudad secreta.
Entonces, las autoridades le ofrecen a Tally la peor de las disyuntivas: o ir en busca de Shay y devolverla al mundo civilizado o permanecer imperfecta para siempre...

Uglies #2 - Perfección: Tally tenía un sueño: ser perfecta. Ahora ya lo ha conseguido y ha perdido, como consecuencia, todos los recuerdos de su pasado. Su única preocupación es ser admitida en la mejor pandilla de la ciudad, y para lograrlo sólo tiene que ganarse la aprobación de Zane -el chico más popular y deseado- durante una peculiar fiesta de disfraces que se llevará a cabo en Nueva Belleza.
Pero la noche de la fiesta, un encuentro fugaz hará que el mundo de Tally se tambalee...

Uglies #4 - Extras: Han pasado unos años desde que la rebelde Tally Youngblood derribara el régimen de los perfectos. Sin sus estrictas reglas y roles, la sociedad está sumida en un renacimiento completo... en el que la popularidad manda. Ahora el objetivo de las camarillas es despertar entusiasmo para conseguir votos: los “Tech-heads” alardean de sus últimos artilugios, los “kickers” difunden modas y cotilleos, y los “surge-monkeys” son adictos a la cirugía plástica extrema. Y todo queda registrado por millones de cámaras: el mundo es como un gigantesco Factor-X.
Aya Fuse tiene quince años y se encuentra en la posición 451.369 del ranking de popularidad, lo que la convierte en una auténtica don nadie. Una “extra”. Pero a Aya esto ya le viene bien: es una kicker y aspira a conseguir una buena historia para convertirse en celebridad, y ser invisible le ayuda a enterarse de todo sin que nadie se dé cuenta.
Entonces, casualmente, conoce a las “Sly Girls”, una pandilla de chicas que hacen locuras aunque lo mantienen en estricto secreto. Aya quiere –necesita– contar su historia, para que todo el mundo sepa lo geniales que son. Pero ello la propulsaría fuera de la tierra de los extras hacia el mundo de la fama, la popularidad... y el peligro extremo. Un mundo para el que no está preparada.